Cuando estaba embarazada, tenía claro que no quería presionarme con el tema de la lactancia, pero no os voy a engañar, me hacía mucha ilusión intentarlo 😊. Sentía ese instinto y quería al menos darle una oportunidad porque también sabía que sería muy bueno para ellos.

Los primeros días: retos y obstáculos en la lactancia materna con gemelos

Después de un parto un poco complicado, no pudimos comenzar la lactancia desde el minuto 0, así que tuvimos que recurrir a la lactancia mixta. Maverick estaba en la UCI en observación por un neumotórax leve y yo, bastante débil después de una hemorragia tras el parto, en la habitación. Al principio, solo pude darle el pecho a Kairi, que si que estaba con nosotros en la habitación en todo momento, y a Maverick cuando me pudieron llevar a verle a neonatos. Esta foto me emociona muchísimo, porque fue la primera vez que fui a verle, y fue muy especial poder ir a la UCI, darle el pecho y ver que el agarre era bueno a pesar de que los días anteriores solo había tomado biberón 🤱 ¡Era un pequeño campeón, igual que su hermana!

La importancia de pedir ayuda y contar con un entorno de apoyo 🤗

Así que, al llegar a casa, continuamos con la lactancia mixta, para poder recuperarme al 100%, y no lo sentí como un fracaso, sino todo lo contrario, como un logro 🏆. Estaba orgullosa de haberlo intentado, y me sentía afortunada por poder darles muchas tomas del día. Hacíamos algunas tomas de lactancia materna suplementando después con bibe, y otras únicamente de biberón. Sin embargo, aparecieron las grietas, y con ellas, el dolor 😓. Sabíamos que llorar de dolor no era normal, así que hicimos lo mejor que podíamos haber hecho: pedir ayuda. Nuestra matrona nos atendió genial y detectó que las grietas se habían producido por un mal agarre, así nos enseñó a colocarlos correctamente y, gracias a sus consejos, todo fue mejorando poco a poco 💪.

Nos dijo: ‘La teta de mami tiene lechita, está calentita y huele a mamá. No tengas miedo de colocarlos bien pegados a ella’. Tras seguir sus indicaciones y probar diferentes posturas, las grietas y el dolor desaparecieron. Y así, logramos varios meses de lactancia, que pasaron de mixta, a lactancia materna exclusiva, reduciendo poco a poco las tomas de fórmula. Casi un año de lactancia… me emociono pensándolo, porque los inicios no fueron fáciles, y sin embargo, todo fue a mejor y disfruté de 11 meses de lactancia feliz con mis pequeños.

Con calma, sin presiones y dejando que todo fluyera 🌊.

Para las mamis que deseen dar el pecho, el entorno es fundamental. Ayudar a colocar a los bebés, poner una almohada para que estéis cómodas, traer agua (¡nunca bebí tanta agua como en esa época! 😅), pero sobre todo… respetar las decisiones, no juzgar y apoyar siempre ✨.

Mamis de múltiples, sí se puede, y no es ninguna locura intentarlo si así lo deseas 💗. Busca ayuda si la necesitas y recuerda que lo más importante es que los bebés necesitan mamis felices. A veces, nuestra salud debe estar por encima de la lactancia. ¡Mucho ánimo!

Para todas aquellas familias que estén interesada, hemos creado un taller junto con Embarazo Gemelar, con información para futuras mamis de múltiples que quieran dar el pecho. Hablamos de posturas, lactancia mixta, experiencias personales, problemas más comunes…

Si con esta información resolvemos alguna duda o aportamos información a otras familias, para nosotros es un sueño cumplido 🥰 Te dejamos aquí un post con algunos consejos y tips que destacamos desde nuestra experiencia.